2019, este año, tomamos aposentos! Las obras avanzan a buen ritmo, y si todo sigue así, el interior de nuestra casa debería estar terminado este verano. Esto me alegra mucho. Además, ya aparecen los primeros rayos de sol. ¡Esto es la felicidad!
En el orden cronológico de la obra y de las cosas por hacer, los niños eran la prioridad. En un artículo anterior, mostré la habitación de Zoé. Hoy, es el turno de los niños. Hugo y Simon. Un dúo de lo más simpático. Sus días transcurren entre risas y riñas, siempre juntos. Era evidente que, a la hora de dormir, no iba a ser diferente.